#ElAmorEsMasFuerte. PATRIA SI, COLONIA NO. Editorial por Marcela Colcerniani

#ElAmorEsMasFuerte, con Marcela Colcerniani y Alejandro Anania Declarar nuestra independencia nunca fue cosa de soplar y hacer botellas. Después de las guerras por la Independencia política, vinieron otras batallas. La lucha por reconquistar la independencia Económica y Territorial está mas vigente que nunca. No olvidamos la presencia de la OTAN en nuestro territorio irredento de las Islas MALVINAS, Georgias y Sandwich del Sur. Tampoco ignoramos que si tenemos al FMI, otra vez respirándonos la nuca, fue por obra de la mafia de CEOS y asociados de multinacionales que nos endeudaron innecesariamente por 100 años para beneficiarse económicamente, con el resultado de someter a la Argentina al control y monitoreo del Fondo. La acción de los especuladores y fugadores de dólares que operan a sabiendas de la existencia de una economía bimonetaria condiciona nuestras posibilidades de desarrollo y nos convierte en un país dependiente al obstaculizar e impedir el desarrollo soberano de Argentina. Volvamos a la historia. Allá por 1816, en las Provincias Unidas los patriotas combatían al enemigo, al tiempo que en el frente interno enfrentaban las intrigas de las embajadas y a los traidores que deseaban cambiar la enseña Española por cualquier otra bandera europea. La declaración de nuestra Independencia “del Rey de España, sus sucesores y Metrópoli”, debió ser ampliada con el agregado “Y de toda otra dominación extranjera”. Lo que da cuenta de que mientras San Martín, Belgrano, Monteagudo, Juana Azurduy, se jugaban el pellejo, había otros que se entregaban al mejor postor. Tener presente nuestra historia permite apreciar los momentos cruciales en la construcción de nuestro país para consolidar la independencia política en el S. XIX, y luego, para construir una Patria Justa, Libre, Soberana, unida al destino de la Patria Grande, durante el S. XX y lo que va del S. XXI, cuando se incorpora a los trabajadores y sectores populares como sujeto histórico, logro del Peronismo -que declaró la Independencia económica- puesto en disputa por las Dictaduras, y así lo expresa el neoliberalismo. Los modelos en pugna son evidentes. Los gobiernos populares hoy bregan por incorporar a sus conquistas el reconocimiento de los DDHH y la ampliación de los derechos de las mujeres, disidencias y originarios, para afianzar en nuestra tierra una Democracia inclusiva con justicia social. Y que en Argentina “las acciones dolorosas” que impone el FMI la paguen los que la fugaron. Del otro lado, están los que buscaron y buscan el beneficio propio, a costa del sufrimiento de la mayoría del pueblo y de la entrega de la Patria. Es un momento bisagra para la Argentina y el mundo. Como dijo CFK “La patria merece una discusión de los problemas que tenemos… Tenemos que encontrar un punto de coincidencia común... Debemos Autoconvocarnos para la construcción de una Argentina en paz.” El pueblo unido, organizado y movilizado podrá construir una Patria para todos. Read more

#ElAmorEsMasFuerte, con Marcela Colcerniani y Alejandro Anania Declarar nuestra independencia nunca fue cosa de soplar y hacer botellas. Después de las guerras por la Independencia política, vinieron otras batallas. La lucha por reconquistar la independencia Económica y Territorial está mas vigente que nunca. No olvidamos la presencia de la OTAN en nuestro territorio irredento de las Islas MALVINAS, Georgias y Sandwich del Sur. Tampoco ignoramos que si tenemos al FMI, otra vez respirándonos la nuca, fue por obra de la mafia de CEOS y asociados de multinacionales que nos endeudaron innecesariamente por 100 años para beneficiarse económicamente, con el resultado de someter a la Argentina al control y monitoreo del Fondo. La acción de los especuladores y fugadores de dólares que operan a sabiendas de la existencia de una economía bimonetaria condiciona nuestras posibilidades de desarrollo y nos convierte en un país dependiente al obstaculizar e impedir el desarrollo soberano de Argentina. Volvamos a la historia. Allá por 1816, en las Provincias Unidas los patriotas combatían al enemigo, al tiempo que en el frente interno enfrentaban las intrigas de las embajadas y a los traidores que deseaban cambiar la enseña Española por cualquier otra bandera europea. La declaración de nuestra Independencia “del Rey de España, sus sucesores y Metrópoli”, debió ser ampliada con el agregado “Y de toda otra dominación extranjera”. Lo que da cuenta de que mientras San Martín, Belgrano, Monteagudo, Juana Azurduy, se jugaban el pellejo, había otros que se entregaban al mejor postor. Tener presente nuestra historia permite apreciar los momentos cruciales en la construcción de nuestro país para consolidar la independencia política en el S. XIX, y luego, para construir una Patria Justa, Libre, Soberana, unida al destino de la Patria Grande, durante el S. XX y lo que va del S. XXI, cuando se incorpora a los trabajadores y sectores populares como sujeto histórico, logro del Peronismo -que declaró la Independencia económica- puesto en disputa por las Dictaduras, y así lo expresa el neoliberalismo. Los modelos en pugna son evidentes. Los gobiernos populares hoy bregan por incorporar a sus conquistas el reconocimiento de los DDHH y la ampliación de los derechos de las mujeres, disidencias y originarios, para afianzar en nuestra tierra una Democracia inclusiva con justicia social. Y que en Argentina “las acciones dolorosas” que impone el FMI la paguen los que la fugaron. Del otro lado, están los que buscaron y buscan el beneficio propio, a costa del sufrimiento de la mayoría del pueblo y de la entrega de la Patria. Es un momento bisagra para la Argentina y el mundo. Como dijo CFK “La patria merece una discusión de los problemas que tenemos… Tenemos que encontrar un punto de coincidencia común... Debemos Autoconvocarnos para la construcción de una Argentina en paz.” El pueblo unido, organizado y movilizado podrá construir una Patria para todos. Read less