March 02, 2017 10:20
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Ezequiel Adamovsky(investigador independiente del CONICET en el Instituto de Historia Argentina y Americana “Dr. Emilio Ravignani”)¨Por un lado la situación es alentadora porque hay mucha organización de la comunidad científica en todo el país pero por otro lado es desalentadora porque el Ministerio de Ciencia y Tecnología avanza con una agenda de ciencia y técnica que no es nueva y profundiza una agenda que ya tenía el ministerio en la presidencia anterior que es enfocar todo el sistema científico y en particular el Conicet a lo que el Ministro llama transferencia o necesidades sociales que en su diccionario está exclusivamente definido como las necesidades de las empresas y esto excluye la labor de las ciencias humanas y las básicas, hay un énfasis excesivo en las ciencias aplicadas y se deja de lado las básicas. Está este discurso instalado de que la ciencia básica es un lujo que se pueden dar los paises mas ricos y que en países como el nuestro tenemos que tomar estos avances y aplicarlos a nuestra realidad, esto es totalmente absurdo cada conocimiento depende de un determinado contexto, aplicar recursos a la ciencia aplicada significa en el corto y mediano plazo un beneficio para las empresas pero en el largo plazo va a significar un empobrecimiento de la ciencia pero evidentemente no se está pensando a largo plazo. Hay un trabajo de desprestigio de las humanidades en redes sociales políticamente orquestado todo esto fue el prólogo para retirar recursos de humanidades esto está teniendo una consecuencia inmediata y directa. Hay una tendencia que creció en el gobierno anterior de las universidades de abandonar las inversiones en ciencia y técnica aprovechando la expansión del Conicet, esto es fantástico en la medida en que el Conicet tenga una política expansiva pero si el Conicet se retira no hay quien financie las investigaciones.¨ Read more
Ezequiel Adamovsky(investigador independiente del CONICET en el Instituto de Historia Argentina y Americana “Dr. Emilio Ravignani”)¨Por un lado la situación es alentadora porque hay mucha organización de la comunidad científica en todo el país pero por otro lado es desalentadora porque el Ministerio de Ciencia y Tecnología avanza con una agenda de ciencia y técnica que no es nueva y profundiza una agenda que ya tenía el ministerio en la presidencia anterior que es enfocar todo el sistema científico y en particular el Conicet a lo que el Ministro llama transferencia o necesidades sociales que en su diccionario está exclusivamente definido como las necesidades de las empresas y esto excluye la labor de las ciencias humanas y las básicas, hay un énfasis excesivo en las ciencias aplicadas y se deja de lado las básicas. Está este discurso instalado de que la ciencia básica es un lujo que se pueden dar los paises mas ricos y que en países como el nuestro tenemos que tomar estos avances y aplicarlos a nuestra realidad, esto es totalmente absurdo cada conocimiento depende de un determinado contexto, aplicar recursos a la ciencia aplicada significa en el corto y mediano plazo un beneficio para las empresas pero en el largo plazo va a significar un empobrecimiento de la ciencia pero evidentemente no se está pensando a largo plazo. Hay un trabajo de desprestigio de las humanidades en redes sociales políticamente orquestado todo esto fue el prólogo para retirar recursos de humanidades esto está teniendo una consecuencia inmediata y directa. Hay una tendencia que creció en el gobierno anterior de las universidades de abandonar las inversiones en ciencia y técnica aprovechando la expansión del Conicet, esto es fantástico en la medida en que el Conicet tenga una política expansiva pero si el Conicet se retira no hay quien financie las investigaciones.¨